Recientemente China logró que la Unión Europea fuera condenada por la aplicación de medidas antidumping a la importación de calzado de ese origen. Esto fue determinado por la Organización Mundial de Comercio, OMC. La decisión del organismo multilateral fue confirmada por la Corte europea.

Pascal Lamy, director de la OMC

Con este dictamen de la OMC en sus manos, cuatro fabricantes de calzado chinos han obtenido el reembolso de los gastos de aduana que habían pagado al ingresar sus productos a la Unión Europea.

Los legisladores europeos se encuentran a la búsqueda de una salida ante la decisión de la OMC, que en medio de la crisis busca mantener vigente las teorías económicas de los ‘90. La decisión que la organización ha tomado, de hecho abre la puerta a un reembolso masivo a las empresas que han debido pagar tasas antidumping.

Fuentes europeas expresaron su preocupación debido a que calculan  que unos 500 fabricantes chinos podrían estar quedarían habilitados para concretar reclamos similares. Los informes advierten que, teniendo en cuenta que las primeras medidas datan del 2006, lo reclamado podría representar una suma muy elevada.

Frente a la situación crítica que viven la mayor parte de las economías europeas, la preocupación se agiganta. Muchos sospechan que China tiene la intención de vincular su ayuda en la crisis de la deuda con la solución de estas cuestiones de antidumping.

Sin embargo la situación de guerra comercial y medidas antidumping no termina aquí. La situación lleva a los Estados Unidos a levantarse también contra el dumping practicado en la industria china.

El gobierno norteamericano denuncia las subvenciones masivas acordadas por China a sus empresas, en tanto que Beijing responde acusando a Washington de buscar pretextos para justificar su tendencia proteccionista.