Bernard Arnault, CEO de LVMH

LVMH, el mayor grupo de productos de lujo con base en Francia, experimentó un freno inesperado en el crecimiento que venía experimentando en sus ventas de productos de moda y del segmento del cuero. Tras la baja en las ventas esperan una caída en el valor de sus acciones.

Entre las marcas más afectadas se cuentan Louis Vuitton, Celine y Dior. El crecimiento de las ventas orgánicas de Louis Vuitton, la principal marca del grupo, fluctuó del 3% en el primer trimestre, al 7% en el segundo y al 2% en el tercero.

LVMH esperaba que las ventas del tercer trimestre fueran del 7%, como en el período anterior. Ahora se espera que el mercado de valores reaccione negativamente a estos resultados y que soporten una caída en el valor de acciones.

No están muy claras las razones de la caída. Diversos analistas explican que estos resultados se deben a la estrategia de Louis Vuitton para ingresar en nuevos mercados, aunque no se esperaba que traería pérdidas en el corto plazo.

“La gerencia de LVMH siempre dijo que el reposicionamiento de Louis Vuitton tomaría 18 meses, pero igualmente estas cifras son peores a lo calculado”, afirmó Antoine Belge, analista de productos de lujo de banco inglés HSBC, que con esto no aclaró nada. Pero los analistas económicos de los bancos en los últimos años no han sabido explicar cosas más básicas, por lo tanto no es bueno tomarlos como puntos de referencia.

Además de los problemas en sus ventas, Louis Vuitton está enfrentando un cambio muy importante en la conducción, ya que el diseñador Marc Jacobs se está alejando y, aparentemente, Nicholas Ghesquiere ocuparía su lugar.