Los despidos generaron la protesta de los trabajadores

La filial Argentina de la empresa Adidas despidió a 112 trabajadores y es probable que tome la misma decisión con otros 300. El lunes 18 de septiembre, Fernando Gray intendente del municipio en el que se encuentra la planta de la compañía alemana, informó que «si no se toman medidas frente a la importación de zapatillas, la planta no tiene futuro».

La fabrica de Adidas, que en Argentina gira bajo el nombre Extreme Gear, responde a la política de apertura indiscriminada de importación de calzado trayendo producción de las fábricas de Oriente, a menos precio logrando una mayor rentabilidad. De esta forma mejoran su ecuación dado que la generalizada caída del consumo produjo una fuerte baja en las ventas.

Fernando-Gray, intendente del distrito de Esteban Echeverría

Según el alcalde Fernando Gray, la apertura irrestricta de la importación realizada por las autoridades gubernamentales genera estos problemas. Sostuvo que Argentina no puede competir con los costos laborales de China y otros países de esa región. “En China las zapatillas son más baratas que las argentinas porque el costo laboral y las condiciones son otras. Un trabajador de China o Vietnam gana 80 dólares y uno argentino, unos 800 dólares, aunque ese dinero aquí no alcanza para vivir”, dijo el intendente Fernando Gray, en declaraciones radiales.

Según funcionario, la fábrica llegó a tener 480 trabajadores. Pero con los despidos de los últimos meses, la dotación de operarios había disminuido a 400. Los recientes 112 despidos redujeron aún más las fuentes de trabajo, y todavía no se sabe qué pasará con el resto de los trabajadores. “Hace un par de años los dueños de Adidas había comprado unos terrenos muy grandes porque pretendían concentrar más producción en nuestro distrito pero, honestamente, ahora les resulta imposible competir”, remarcó.
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Radio 10 / CueroAmérica

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